Oraciones y bendiciones

Oración de bendición del agua y la sal en latín

S – Adiutórum nostrum + in nómine Dómini.
M – Qui feci coélum et terram.
(Exorcismo de la sal)
S – Exorcízo te, creatúra salis, per Deum + vivum, per Deum + verum, per Deum + sanctum, per Deum, qui te per Eliséum prophétam in aquam mitti iussit, ut sanarétur sterílitas aquae: ut efficiáris sal exorcizátum in salútem credéntium: et sis ómnibus suméntibus te sánitas ánimae et córporis et effúgiat atque discédat a loco, in quo aspérsum fúeris, omnis phantásia et nequítia vel versútia diabólicae fraudis, omnísque spíritus immúndus adiurátur per eum qui ventúrus est iudicáre vivos et mórtuos, et saéculum per ignem.
M – Amen.


Te exorcizo sal por el Dios vivo, por el Dios verdadero y por el Dios santo, para que te conviertas en sal exorcizada para salud de los fieles tanto en el cuerpo como en el alma y para que, en los lugares donde sea puesta esta sal bendita, se aleje todo poder del enemigo y todo espíritu maligno.
Oh Señor, imploramos tu misericordia para que te dignes bendecir y santificar esta sal a fin de que se convierta en sal exorcizada para bien del cuerpo y del alma de los creyentes que la consuman; y para que todo aquello que sea tocado por ella carezca de todo poder e influencia del maligno. Amén.


Oremus.
S – Imménsam cleméntiam tuam, omnípotens aetérne Deus, humíliter implorámus: ut hanc creatúram salis, quam in usum géneris humáni tribuísti, bene+dícere, et sancti+ficare tua pietáti dignéris: ut sit ómnibus suméntibus salus mentis et córporis: et quídquid ex eo tactum vel respérsum fúerit, cáreat omni immundítia, omníque impugnatióne spiritális nequítiae. Per Dóminum nostrum Iesum Christum, Fílium tuum, qui tecum vivit et regnat in unitáte Spíritus Sancti, Deus, per omnia saécula saeculórum.
M – Amen.




(Exorcismo del agua)
S – Exorcízo te, creatúra aquae, in nómine Dei + Patris omnipoténtis, et in nómine Iesu + Christi Fílii eius Dómini nostri, et in virtúte Spíritus + Sancti: ut fias aqua exorcizáta ad effugándam omnem potestátem inimíci, et ipsum inimícum eradicáre, et explantéare váleas cum ángelis suis apostátitcis: per virtútem eiúsdem Dómini nostri Iesu Christi: qui ventúrus est iudicáre vivos et mórtuos, et saéculum per ignem.
M – Amen.


Oh agua, criatura de Dios, te exorcizo en el nombre de Dios Padre (+) Todopoderoso, y en el nombre de Jesús (+) Cristo Su Hijo, nuestro Señor, y en el poder del Santo (+) Espíritu. Te exorcizo para que puedas poner en fuga todo el poder del enemigo, y puedas erradicar y suplantar a ese enemigo con sus ángeles apóstatas, a través del poder de nuestro Señor Jesucristo, que vendrá a juzgar a los vivos y a los muertos y el mundo en llamas.



Oremus.
S – Deus, qui ad salútem humáni géneris, máxima quaéque sacraménta in aquárum substántia condidísti: adésto propítius invocatiónibus nostris, et eleménto huic multímodis purificatiónibus praeparáto, virtútem tuae bene+dictiónis infúnde: ut creatúra tua mystériis tuis sérviens, ad abigéndos dáemones, morbósque pelléndos, divínae grátiae sumat efféctum: ut quídquid in dómibus vel in locis fidélium haec unda respérserit, cáreat omni immundítia, liberétur a noxa: non illic resídeat spíritus péstilens, non áura corrúmpens: discéndat omnes insídiae laténtis inimíci: et si quid est, quod aut incolumitáti habitántium ínvidet, aut quiéti, aspersióne huius aquae effúgiat atque discédat: ut salúbritas per invocatiónem sancti tui nóminis expetíta, ab ómnibus sit impugnatiónibus defénsa. Per Dóminum nostrum Iesum Christum, Fílium tuum, qui tecum vivit et regnat in unitáte Spíritus Sancti, Deus, per omnia saécula saeculórum.
M – Amen.

Oremos. Oh Dios, para la salvación de la humanidad, construiste tus mayores misterios sobre esta sustancia, el agua. Con su amabilidad, escuche nuestras oraciones y derrame el poder de su bendición (+) en este elemento, preparado para muchos tipos de purificaciones. Que esto, tu criatura, se convierta en un agente de la gracia divina al servicio de tus misterios, para ahuyentar a los espíritus malignos y disipar las enfermedades, para que todo en los hogares y otros edificios de los fieles que se rocía con esta agua, pueda ser eliminado. de toda impureza y liberado de todo daño. No permita que el aliento de la infección ni el aire portador de enfermedades permanezcan en estos lugares. Que las artimañas del enemigo al acecho no sirvan de nada. Deje que lo que pueda amenazar la seguridad y la paz de los que viven aquí sea puesto en fuga por la aspersión de esta agua, para que la salud obtenida invocando su santo nombre, sea segura contra todo ataque. Por Cristo nuestro Señor.


(Se mezcla la sal en el agua poniendola tres veces en forma de cruz)
S – Commíxtio salis et aquae párite fiat, in nómine Pa+tris, et Fí+lii, et Spíritus + Sancti.
M – Amen.

Que ahora se haga una mezcla de sal y agua, en el nombre del Padre, y del (+) Hijo, y del Espíritu Santo.

S – Dóminus vobíscum
M – Et cum spíritu tuo.

Oremus.
S – Deus invíctae virtútis áuctor, et insuperábilis impérii Rex, ac semper magníficus triunphátor: qui advérsae dominatiónis vires réprimis: qui inimíci rugiéntis saevítiam súperas: qui hostíles nequítias poténter expúgnas: te, Dómine, treméntes et súpplices deprecámur ac pétimus ut hanc creatúram salis et aquae dignánter aspícias, benígnus illústres, pietátis tuae rore sanctífices: ut ubicúmque fúerit aspérsa, per invocatiónem sancti nómnis tui, omnis infestátio immúndi spíritus abigátur: terrórque venenósi serpéntis procul pellátur: et praeséntia sancti Spíritus nobis misericórdiam tuam poscéntibus, ubíque adésse dignétur. Per Dóminum nostrum Iesum Christum, Fílium tuum, qui tecum vivit et regnat in unitáte eiúsdem Spíritus Sancti, Deus, per omnia saécula saeculórum.

M – Amen.

Oremos. Oh Dios, Creador Rey invencible e invencible, Víctor siempre glorioso, mantienes bajo control las fuerzas empeñadas en dominarnos. Superas la crueldad del enemigo furioso, y en tu poder derrotas al enemigo malvado. Con humildad y temor te rezamos, oh Señor, y te pedimos que mires con favor esta sal y agua que creaste. Brilla con la luz de tu amabilidad. Santifícalo con el rocío de tu amor, de modo que, mediante la invocación de tu santo nombre, donde sea que se rocíe esta agua y sal, pueda desviar cada ataque del espíritu inmundo y disipar los terrores de la serpiente venenosa. Y donde quiera que estemos, haz que el Espíritu Santo nos esté presente, que ahora imploran tu misericordia. Por Cristo nuestro Señor.


Bendición del aceite

Te exorcizo, aceite, por Dios Padre que hizo todo lo que existe. Que se aleje de este aceite toda fuerza del maligno y toda acción diabólica a fin de que todos los que lo tomen puedan recuperar la salud del cuerpo y del alma, en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Oh Dios, dígnate bendecir y santificar este aceite con el cual mandaste ungir a los enfermos, a fin de que una vez obtenida la salud, te den las gracias. Y te pedimos que cuantos usen este aceite, que hemos bendecido en tu Nombre, queden libres de toda enfermedad o de cualquier maleficio o influencia del maligno. Te lo pedimos Padre en el Nombre de Jesús, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos. Amén.


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